Dominga
Cuando su padre adoptivo fallece, Dominga, que apenas tiene catorce años, consigue un novio que la pide en matrimonio. Su madre acepta, pero el novio la deja para casarse con una rica viuda. La madre de Dominga considera esto una deshonra a su apellido así que la interna en un convento.
Dominga no soporta la vida de claustro y lucha constantemente para salir de ahí. Su último intento por escapar genera una confrontación entre el poder judicial y la iglesia de Arequipa.