Supongo que lo primero que se le viene a uno a la mente cuando escucha “relación a distancia” es mucho WhatsApp y FaceTime; y entonces, la situación no es tan dramática. Después de todo, y especialmente ahora en época de pandemia, el internet ha facilitado muchísimo las cosas.
Pero imaginen una relación a distancia sin internet. ¿La situación se vuelve más tétrica?
Pues es esa la relación que ando teniendo: una relación amorosa a larga distancia sin internet. Una relación que se reduce a llamadas por teléfono (no por internet) y mensajes de texto (SMS, no WhatsApp).
"Berlin es una mujer hablando de mujeres sin importarle seguir con los roles sociales".
Publicado originalmente el 03/12/19
A mí me gustan las mujeres fuertes, decididas; las que no tienen miedo de caerse –porque saben que tienen la fuerza para levantarse nuevamente–; a las que no les da vergüenza hacer lo que realmente les plazca; las que no pretenden ser perfectas –sino felices–; las que entregan el corazón –aunque se los hagan puré–; las que son, pues, genuinamente sinceras. Una mujer de verdad, no una muñeca Barbie.
Se acercan las vacaciones de fin de año. Un momento incómodo para los introvertidos. Todo el mundo nos mira raro cuando decimos que nuestro plan para el 31 de diciembre es quedarnos en casa (o en cualquier lado) con un buen libro. No entienden cómo podemos ser felices con eso. Pero lo somos. Y mucho. Para mí un buen libro es uno que te atrapa de principio a fin. Al respecto, Stephen King dice: “En general, la gente que compra libros no se guía por el mérito literario de una novela. Quieren una historia entretenida para el avión (…)”. Es lo que me pasa a mí.