En 1941, fuerzas militares japonesas irrumpieron en el Sudeste Asiático, desalojando a las fuerzas coloniales europeas y americanas que se habían establecido en la zona durante décadas, o incluso siglos. Para 1945 –y pese a la derrota japonesa en la Segunda Guerra Mundial– las condiciones sociales y políticas habían cambiado tanto que las potencias europeas no fueron capaces de restaurar completamente la condición colonial de los pueblos de la región.
Centrándose en los japoneses y los habitantes del Sudeste Asiático, particularmente de Filipinas, Indonesia y Vietnam, el historiador Jorge Bayona Matsuda examinará la historia anterior de la región y el efecto que el interludio japonés tuvo en ella, así como la manera en que se articularon las dinámicas de colaboración y resistencia por parte de los lugareños ante la contradictoria situación impuesta por los japoneses.